BOCA EN NÚMEROS

Boca concluyó la temporada regular de la edición 20/21 con altibajos, pero cumpliendo el objetivo principal de estar entre los 4 mejores. Analizamos lo que dejó la primera parte de una Liga Nacional particular.

El azul y oro salió el sábado 20 de marzo dependiendo de si mismo. Tras vencer a dos rivales directos como Regatas y San Martín, el Xeneize podía definir su destino en el último duelo ante Comunicaciones y, con un triunfo, sellar su clasificación entre los mejores cuatro equipos de la temporada. Un partido que se le fue de las manos y una derrota (86-96) en suplementario postergó la definición por 24 horas más, con Instituto perdiendo ante Oberá y dándole la clasificación al equipo de Gonzalo García.

Foto: La Liga Contenidos.

PUNTO APARTE

Boca finalizó la temporada regular con un récord 25-13 (65,8%), a un partido de diferencia de Gimnasia y Obras que, si otra hubiese sido la suerte, forzaba a Boca a jugar una desgastante reclasificación con los demás equipos de mitad de tabla por un lugar en los cuartos de final. Arriba, Regatas concluyó 3° también con un juego de ventaja sobre Boca y lejos del resto de los 18 equipos dominan Quimsa y San Lorenzo (1° y 2° respectivamente en eficiencia, puntos anotados y puntos de la banca).

Foto: La Liga Contenidos.

ES LA HORA, ES LA HORA…

Una de las primeras novedades para los equipos en esta temporada edición “burbuja” fue la extensión del abanico de horarios ante la única disponibilidad de dos escenarios (Ferro y Obras). Si bien en la recta final se fue decantando más por el horario tradicional (21 y 22), en la primera parte de la temporada el Xeneize jugó casi la mitad de los partidos en los horarios matutinos: mientras que en el de apertura de la jornada (11 horas) el récord fue de 6-4, el mejor horario para el itinerario boquense fue a las 14 ya que ganó los seis partidos que disputó a esa hora. Al resto de los nuevos horarios les siguen récords parejos: 1-1 a las 16 (triunfo ante Atenas y derrota ante Gimnasia) y 4-4 a las 19. En el horario tradicional fue cuando más jugó y ganó: ocho triunfos y tres derrotas.

Foto: La Liga Contenidos.

BACK TO BACK

Los últimos formatos de la Liga Nacional se caracterizaron por una desigualdad a la hora de organizar el fixture de los equipos: seguidillas de 5 partidos en 7 días y descansos extensos han sido obstáculos a superar por varios planteles con el objetivo de llegar a la postemporada. Si bien las giras de visitante y los kilómetros recorridos fueron eliminados con la pandemia, otra novedad que trajo la temporada 20/21 fueron la disposición de partidos en días consecutivos, los famosos back-to-back de la NBA. Un desgaste distinto para los jugadores locales que, evidentemente, repercutió en los planteles de corta rotación. Exceptuando a Quimsa y San Lorenzo (quienes con un plantel largo y con buena repartición de minutos han logrado encadenar victorias consecutivas en back-to-back reiteradas veces), la regla indicó un triunfo inicial y una posterior derrota para la mayoría de los equipos, incluido Boca. “Con el trajín de partidos que hay, evidentemente hay desgaste, golpes y dolores”, sostuvo Gonzalo García en Triple Xeneize Radio acerca de la recuperación física de los jugadores frente a los plazos del nuevo formato. Desde el 6/11 hasta el 20/3, Boca jugó 26 de sus 38 partidos en back-to-back y sólo en 4 ocasiones logró encadenar dos triunfos en fila (2 de las 4 ocasiones fueron desde el 12/2, fecha que más adelante analizaremos).

Foto: La Liga Contenidos.

VOLVER A EMPEZAR…

Planteles con contagios, partidos suspendidos y recesos constantes: tres sucesos que resumen perfectamente lo que fue la temporada 20/21. La organización del torneo sobre la marcha fue causante de una Liga Nacional entrecortada, en la que a duras penas se pudo alcanzar los 30 días de competencia ininterrumpida. Con Boca apenas jugando 5 partidos en noviembre y un brote de contagios en distintos equipos, una carta por parte del Ministerio de Turismo y Deportes suspendió el torneo hasta el 04/12, que continuó hasta el tradicional receso por fiestas y permitió al Xeneize encontrar ritmo ganando siete juegos y perdiendo tres, de los cuales dos fueron ante candidatos como Quimsa y San Martín.

Foto: La Liga Contenidos.

El 2021 fue una bocanada de aire para los dirigidos por García: el descanso y la reanudación ante equipos posicionados de la mitad de tabla para abajo permitió a Boca consolidar su propio juego, alcanzando rachas de 2 y 3 triunfos en fila (incluido el triunfo ante Argentino anotando 107 puntos, máxima de temporada). Otro rebrote de casos en algunos planteles no llevó a otro receso pero sí a la suspensión y reprogramación de partidos, lo que significó para Boca esperar 7 días hasta el próximo partido.

Foto: La Liga Contenidos.

Febrero fue un mes breve pero dulce para el Xeneize. Si bien apenas jugó 5 partidos (4-1) antes del receso por Ventanas Clasificatorias FIBA, el equipo encontró su mejor versión encadenando 4 victorias al hilo y en escenarios difíciles (un triunfo ante Quimsa por un doble y una paliza ante Instituto por 20). Costó replicar ese nivel en la reanudación luego de casi un mes sin competencia, reflejado en una derrota impensada ante Ferro (64-67), pero 3 triunfos en fila (Regatas, San Martín, La Unión) permitieron a Boca lograr la clasificación directa a los cuartos de final.

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